Trabajar con familiares y amigos, ¿bendición o pesadilla?

Todos conocemos las cifras, en España casi un 80% de los trabajos no llegan a salir al mercado porque se cubren antes por conocidos, así mismo hay más de dos millones de empresas familiares que generan el 75% del empleo del país, por lo que es muy común que mucha gente se pase el día trabajando al lado de su padre o su hermano. Pero, ¿cuáles son los problemas con los que se enfrentan?

Primero hay que distinguir entre trabajar bajo el mando de tu amigo o familiar (o al revés, tenerlo bajo tu mando) o cofundar una empresa juntos. En el primer caso se establece una relación de subordinación que puede dar lugar a los problemas (imagina tener que decirle a tu amigo que no ha hecho bien su trabajo o volver a casa con tu pareja después de que te echara una bronca en la oficina). Para este caso los expertos proponen que a la hora de la contratación hay que asegurarse de que el candidato tenga el perfil y está capacitado para llevar a cabo el trabajo. También que se establezcan límites claros de donde termina la relación profesional y donde comienza la personal. Por otra parte un amigo o familiar siempre estará más dispuesto a apoyarte y a entendelor si tienes que tomar alguna medida impopular.

Como decíamos otro caso distinto es fundar una empresa con un familiar o amigo, porque en este caso los dos estaréis al mismo nivel. Aquí los problemas suelen darse si hay dudas de que todos estén aportando a la empresa al mismo nivel. Para eso, también aquí los consejos entran dentro de lo razonable, no te metas en un negocio con alguien solo porque “es tu amigo”, todos deberíais poder aportar algo diferenciado a la empresa y mucho mejor si habéis trabajado antes juntos. A veces la gente sorprende y no es lo mismo irte con alguien de cañas, que levantar una empresa desde cero. El lado contrario es que te estarías metiendo en una situación estresante y complicada con alguien al lado al que conoces muy bien (y que te conoce) y en el que puedes confiar completamente.

Así que ya sabes, valora todos los pros y contras y toma la mejor decisión posible, en esto, como en tantas otras cosas, el sentido común es tu aliado.